domingo, 25 de mayo de 2014

Europa y el Medio Ambiente

Llevamos unos cuantos días en que los políticos dicen que Europa se juega mucho hoy con las elecciones a su Parlamento. No lo niego, pero también creo que no es correcta la frase y que debería cambiarse por algo similar a: los políticos estamos jugando con Europa.
La alta abstención es la consecuencia lógica de una unión pseudo-económico-política que adolece de una esencia verdadera por la cual una persona en Holanda, en España o en otro país miembro tenga la misma consideración en cualquier aspecto que se analice (derechos, impuestos, justicia, etc.). Me imagino que las razones se encuentran en intereses que están fuera de lo políticamente correcto.

Quiero ir más allá con esta reflexión y entrar en lo que realmente me ha llevado a ella.

La pérdida de importancia estratégica y geopolítica de Europa es una realidad que galopa en este siglo a la vez que las economías del Este asiático -sobre todo-, del Sur de América y de otros puntos geográficamente alejados de nuestro continente, punta de lanza durante bastantes siglos de multíples disciplinas que, en la mayor parte de los casos, han hecho avanzar positivamente a la humanidad. Hoy en día, vemos cómo muchos de estos avances se olvidan por razones mercantiles y, por desgracia, asumimos esta situación.
El Medio Ambiente (del cual considero que formo parte) es el mayor perjudicado y el primero del que se olvidan los políticos. Una pena. Europa podría comandar perfectamente una nueva era, un nuevo tiempo donde, frente a esta amenaza -ya realidad- de cambios perjudiciales, se tomen soluciones y medidas compartidas con el resto del planeta. Disponemos de la mejor posición para ello con gente preparada, conocimientos, recursos y, lo que siempre se olvida, ganas de avanzar.

Campos básicos y urgentes como las energías renovables, las aguas y los residuos son razones más que suficientes para tomar una posición que ayude a la humanidad y, a la vez, confiera un estatus adecuado al viejo continente en este mundo, global en las formas pero reiteradamente atomizado en los intereses.


La era ambiental necesaria y urgente está en manos de quienes ya hemos crecido, contaminado y aprendido, pero preferimos dormir y que el mundo se desarrolle sin orden ni concierto. Un momento... ¿preferimos? No, algunos no, pero como nuestros representantes políticos son los que deciden y ahora todo es relativo, mejor será decir "prefieren".

Me reafirmo en lo dicho: están jugando con Europa. Además añado: y con el mundo.